Julio de 2015

En septiembre comenzaremos el curso escolar con nuevas ilusiones y con la alegría de saber que todo esfuerzo por el reino de Dios es una extraordinaria manera de hacer posible la fuerza del Evangelio que nos purifica y nos hace hermanos e hijos de Dios. Sería muy agradable, a los ojos de Dios, recordar que todos los 29 de cada mes se ofrece la Eucaristía por el Papa, nuestro Obispo y sus intenciones y por todos los miembros del Apostolado de la Oración. Unirnos a la Plegaría eucarística nos une más y nos hace crecer como hijos de Dios y de la Iglesia.