Abril de 2015

Ya desde ahora, debemos preparar nuestro corazón para dejar que nuestra vida se centre en María la Virgen y de esta forma el mes de mayo, dedicado a honrar a la Madre de Dios nos empuje a ser sencillos y humildes como Ella y, de esta forma, actualizar nuestro compromiso como bautizados y testigos del Evangelio de Cristo. Que Ella, la Esclava del Señor nos ayude a ser esclavos del amor que transforma todas las cosas.